Seis de cada 10 alumnos consideran que sus profesores están teniendo muchas dificultades para darles clase durante la pandemia.
Tras la experiencia del confinamiento y de un curso marcado por la pandemia, los estudiantes españoles son conscientes de la importancia de incorporar las nuevas tecnologías y las clases digitales. Así se deduce de los resultados de la encuesta Tendencias en la sociedad digital durante la pandemia de la covid-19, publicada en marzo por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El 86,3% de los alumnos con internet que responde, la mayoría en grado superior (71%), opina que si bien la educación presencial “es imprescindible”, debería incorporar “algunas actividades por internet, de manera creciente y de acuerdo con la edad del alumnado”. El 63% no considera que la experiencia de la educación en línea durante el confinamiento haya sido muy negativa. De hecho, solo tres de cada 10 estudiantes creen, tras la experiencia, que la única fórmula válida es la educación presencial.
Los alumnos se muestran críticos con la labor de los centros durante este último año. El 91,7% de los estudiantes encuestados cree que las instituciones se vieron obligadas a improvisar métodos y protocolos por internet para poder sacar adelante el programa educativo y la mitad (50,2%) sostiene que el centro no estableció métodos y protocolos comunes, y cada profesor actuó con sus propios criterios. El 33,4% es de la opinión de que la ausencia de protocolos obligó a delegar en los adultos responsables de los alumnos la misión de explicar los contenidos pendientes, y que el centro educativo se limitó a enviar por correo electrónico los paquetes de deberes.
El 94,1% considera que los profesores tendrían que recibir “una formación específica y profunda sobre las técnicas pedagógicas de la educación en línea. Más de la mitad (53%) considera que los profesores no están “altamente cualificados para usar métodos digitales en la educación”, aunque la mayoría cree (86%) que “han podido adaptarse a la situación usando internet y otras tecnologías”. Seis de cada 10 estudiantes perciben que los educadores han tenido muchas dificultades para hacer su trabajo adecuadamente durante el estado de alarma y la pandemia y se sienten frustrados, la misma proporción de los que creen que estos “se sienten desbordados por la situación”.
En el caso de los convivientes con estudiantes durante la pandemia, en este caso sobre todo padres de alumnos en edad escolar, el 47,3% considera la experiencia del confinamiento “muy negativa y demuestra que la única fórmula válida es la educación presencial”, frente al 46% que no está de acuerdo con esta apreciación. El 78% de los padres está de acuerdo en la necesidad de que los centros incorporen actividades por internet de manera creciente de acuerdo con la edad de los alumnos. El 92% opina que los profesores deben recibir una formación específica y profunda sobre la técnicas pedagógicas de la educación digital.
El 59% de los padres afirman que la necesidad de estar confinados durante la pandemia les ha hecho participar más activamente en la educación de los niños o jóvenes en su hogar, frente al 39,8% de los que responden que no.
El sondeo se ha realizado del 8 al 17 de marzo de 2021 con más de 3.000 encuestas en 1.068 municipios de las 50 provincias.
Fuente: elpais.com