El documento de trabajo «Los retos de la IA en la educación superior y las respuestas institucionales: ¿Hay lugar para marcos de competencias?», publicado por UNESCO IESALC, ofrece una revisión sistemática del estado actual de la integración de la inteligencia artificial (IA) en la educación superior. Aunque la IA presenta oportunidades significativas para la transformación pedagógica y administrativa, las instituciones de educación superior (IES) tienen lagunas críticas para prepararse y responder eficazmente a esta realidad. Las autoras, Arianna Valentini y Alep Blancas, defienden la necesidad urgente de desarrollar un marco integral de competencias de IA adaptado específicamente al contexto de la enseñanza superior.
La metodología del informe incluyó una revisión bibliográfica de enero de 2021 a agosto de 2024, complementada con un ejercicio de evaluación de las iniciativas relacionadas con la IA en 16 instituciones de educación superior en cinco regiones de la UNESCO. Este doble enfoque permitió a las investigadoras identificar una brecha crítica entre el rápido ritmo de adopción de la IA y la falta de respuestas institucionales estructuradas.
Principales hallazgos
El documento identifica tres razones principales que subrayan la necesidad de un marco específico de competencias en IA para las IES: un importante déficit de competencias entre los estudiantes y el profesorado, respuestas institucionales fragmentadas ante IA y la ausencia de un marco global y adaptable para la educación superior.
1. La brecha de competencias en IA en el mundo académico y laboral
El documento de trabajo pone de relieve una notable disparidad entre la influencia de la IA y las competencias de quienes forman parte del sistema de educación superior. Señala que, según las estimaciones, el 60% de los empleos mundiales se verán afectados por la IA en los próximos años, lo que creará una necesidad acuciante de mano de obra con conocimientos de IA. Sin embargo, la revisión de la literatura muestra que el 58% de los estudiantes no se sienten preparados para esta realidad, y casi la mitad carecen de confianza en sus habilidades de IA.
Para el profesorado, los retos son igualmente pronunciados. La revisión bibliográfica señala que sólo el 22% del profesorado utiliza herramientas de IA en la Commonwealth of Learning. Esta baja tasa de adopción se atribuye a la preocupación por la integridad académica, la posibilidad de plagio y el miedo a ser sustituido por la IA.
Las autoras sostienen que un marco de competencias es crucial no sólo para la competencia técnica, sino para fomentar una comprensión más profunda de las implicaciones éticas, sociales y profesionales de la IA.
2. Insuficiente respuestas institucionales
Aunque muchas universidades están poniendo en marcha iniciativas de IA, estas respuestas suelen ser ad hoc y carecen de una estrategia cohesionada. La mayoría de estas iniciativas se centran en el desarrollo de directrices para el uso de la IA generativa, como ChatGPT, en lugar de crear un marco de competencias básico para toda la institución. Este enfoque fragmentado no proporciona a los estudiantes y al profesorado el desarrollo sistemático de las habilidades necesarias para desenvolverse con eficacia en un mundo integrado en la IA.
El documento sugiere un cambio hacia una «pedagogía basada en la IA» más completa. Este enfoque aprovecha las herramientas de la IA no sólo para mejorar la eficiencia, sino también para fomentar las habilidades de pensamiento de orden superior, el aprendizaje colaborativo y la resolución interdisciplinar de problemas. Va más allá de centrarse en las disciplinas técnicas (STEM) para integrar la alfabetización en IA en las ciencias sociales y las humanidades, reconociendo la influencia de la IA en todos los sectores.
3. Ausencia de un marco integral de competencias en IA
El informe identifica un vacío crítico en la literatura académica y en la práctica institucional: la falta de un marco de competencias de IA estandarizado y exhaustivo específico para la educación superior. La mayoría de los marcos existentes están diseñados para la educación K-12 -se refiere a la gama de años desde el jardín de infancia hasta el duodécimo grado, que abarca tanto la educación primaria y secundaria- o son altamente especializados y específicos del contexto, centrándose en las disciplinas STEM, lo que su aplicabilidad general.
Basándose en los marcos existentes de la UNESCO para la enseñanza primaria y secundaria, los autores proponen el desarrollo de un nuevo marco para las IES que aborde sus misiones específicas de enseñanza, investigación y divulgación. Este marco abarcaría tres dimensiones clave:
- Conocimientos: Comprensión de los conceptos básicos de la IA, su funcionalidad y las consideraciones éticas
- Habilidades: Desarrollar la capacidad de utilizar, evaluar e interactuar de forma crítica con las herramientas de IA.
- Actitudes y valores: Fomentar un enfoque de la IA responsable y centrado en el ser humano que dé prioridad a los principios de justicia, responsabilidad, transparencia y equidad.
El documento constituye un sólido análisis basado en pruebas, que diagnostica los retos actuales de la educación superior y sostiene que la cuestión no es si la IA transformará la educación superior, sino si las IES estarán preparadas para guiar esta transformación de forma responsable. Mediante la adopción de un marco de competencias sistemático y exhaustivo en materia de IA, las universidades pueden desempeñar su papel esencial en la preparación de una nueva generación de graduados para tengan una participación significativa en una sociedad integrada en la IA.
Fuente: Unesco / iesalc.unesco.org