El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una condición que afecta entre el 5 y el 10 % de los niños en Colombia, según el Instituto Neurológico de Colombia. Este trastorno se caracteriza por dificultades para mantener la atención, impulsividad y problemas para organizar las actividades cotidianas. Estos síntomas pueden generar obstáculos para la adaptación de los estudiantes con TDAH en los entornos escolares tradicionales, que suelen exigir un ritmo y una metodología uniformes para todos los alumnos.
Este trastorno va más allá de una distracción ocasional. Es una condición clínica que puede interferir significativamente con la cotidianidad y el funcionamiento social de quienes lo presentan. Sus síntomas no solo pasan por la dificultad de prestar atención a tareas específicas, sino por la impulsividad en la toma de decisiones y los aprietos para organizar actividades de la vida diaria.
Con este panorama, los colegios deberían considerar dos puntos: ser flexibles y adaptarse a las necesidades de los estudiantes. En otras palabras, romper con el modelo educativo tradicional, en el que los alumnos son quienes deben ajustarse a los parámetros de las instituciones.
En la actualidad, hay varias instituciones que con sus metodologías y planes de estudio se están adaptando a los requerimientos de los estudiantes, entendiendo que trastornos como el TDAH pueden convertirse en una oportunidad de mejora. Una de ellas es Genuine Digital School, un colegio virtual que opera bajo el currículum estadounidense y hoy cuenta con más de 400 alumnos en los cinco continentes.
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una condición que afecta entre el 5 y el 10 % de los niños en Colombia, según el Instituto Neurológico de Colombia. Este trastorno se caracteriza por dificultades para mantener la atención, impulsividad y problemas para organizar las actividades cotidianas. Estos síntomas pueden generar obstáculos para la adaptación de los estudiantes con TDAH en los entornos escolares tradicionales, que suelen exigir un ritmo y una metodología uniformes para todos los alumnos.
Este trastorno va más allá de una distracción ocasional. Es una condición clínica que puede interferir significativamente con la cotidianidad y el funcionamiento social de quienes lo presentan. Sus síntomas no solo pasan por la dificultad de prestar atención a tareas específicas, sino por la impulsividad en la toma de decisiones y los aprietos para organizar actividades de la vida diaria.
Con este panorama, los colegios deberían considerar dos puntos: ser flexibles y adaptarse a las necesidades de los estudiantes. En otras palabras, romper con el modelo educativo tradicional, en el que los alumnos son quienes deben ajustarse a los parámetros de las instituciones.
En la actualidad, hay varias instituciones que con sus metodologías y planes de estudio se están adaptando a los requerimientos de los estudiantes, entendiendo que trastornos como el TDAH pueden convertirse en una oportunidad de mejora. Una de ellas es Genuine Digital School, un colegio virtual que opera bajo el currículum estadounidense y hoy cuenta con más de 400 alumnos en los cinco continentes.
El psicólogo Santiago Montaña Ramírez, líder de formación integral de Genuine, explica cómo desde el colegio se está abordando el tema: “Hay una flexibilidad, en el sentido en que el colegio acompaña a los estudiantes y entiende que sus ritmos a veces son diferentes. Además, estamos fomentando estrategias para apoyar su proceso y que sea más participativo, como contenidos multimedia, videos educativos, simulaciones, juegos, y, en general, el uso de la tecnología”.
Una de las herramientas que los colegios virtuales ofrecen a los estudiantes con TDAH son las plataformas de educación digital, que funcionan como un asistente personal que les ayuda a organizar su día a día. “Estas plataformas les ayudan a conocer los contenidos de las siguientes clases, estar pendientes de sus asignaciones, verificar en qué orden deben realizarlas y hacerles seguimiento a sus pendientes”, agregó el experto.
Pero no se trata solo de la implementación de la tecnología, sino también de la formación docente y del apoyo que debe comprender a fondo el trastorno y sus implicaciones para poder ofrecer una atención efectiva a los estudiantes que lo presentan.
¿Qué hacer en las aulas?
Para los profesores, enfrentarse al panorama de apoyar a los niños en el manejo de los síntomas del TDAH puede ser complejo. La mayor parte de los menores con este diagnóstico no participan en programas de educación especial, aunque requieren asistencia extra de manera habitual.
Estos son algunos consejos recopilados por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de la agencia nacional de salud pública de Estados Unidos, que los docentes pueden implementar en las aulas de clase.
Comunicación:
- Brindar retroalimentación frecuente y estar atento a los comportamientos positivos.
- Tener en cuenta la influencia del TDAH en las emociones.
- Avisar varias veces y con suficiente anticipación antes de hacer transiciones y cambios en las rutinas del aula.
- Entender que los niños con TDAH podrían quedar absortos (superconcentrados) en actividades que les interesan y podrían necesitar ayuda adicional para redirigir su atención.
Asignaciones y tareas:
- Dejar bien claras las asignaciones y verificar con los estudiantes si entendieron lo que deben hacer.
- Brindar opciones para demostrar su dominio (por ejemplo, deje que el alumno escoja entre un ensayo escrito, un informe oral, un examen en línea o un proyecto de práctica).
- Intentar que las tareas no sean extensas y repetitivas.
- Permitir descansos porque para los niños con TDAH poner atención implica un esfuerzo adicional y los puede cansar mucho.
- Hacer pausas activas.
- Minimizar las distracciones en el aula.
- Usar herramientas de organización como un fólder de tareas que sirve hacer seguimiento en la cantidad de cosas que el niño debe hacer.
Además de la flexibilidad curricular, el uso de la tecnología y la capacitación docente especializada, otras estrategias que los colegios virtuales están implementando para facilitar la etapa escolar de los estudiantes con TDAH son: el establecimiento de equipos multidisciplinarios para brindar apoyo integral (con psicólogos, terapeutas, expertos en tecnología), la ejecución de actividades que fortalezcan las habilidades socioemocionales, el monitoreo continuo del progreso y la comunicación abierta con los padres, sobre todo en los casos concretos de educación virtual, dado que pueden prestar mayor atención a sus hijos durante las clases.
Fuente: Ricardo Parada / infobae.com