Toda organización depende de una clase de tecnología o un conjunto de tecnologías para funcionar, ejecutar sus operaciones, cumplir sus tareas y conseguir sus objetivos, situación que no escapa el sector educativo que va desde la tecnología rudimentaria (como pizarrón y tiza para enseñar en un aula de clase) o sofisticada (como la integración de las TIC con dispositivos y acceso a internet o aulas virtuales para la enseñanza de la educación a distancia). En el cual la tecnología es un componente del medio ambiente que a medida que las organizaciones (en nuestro caso educativas) las adquieren, incorporan y asimilan en sus sistemas, influyen tanto en lo interno o como externo. En consecuencia, la tecnología es una fuerza externa del ambiente que impone retos y dificultades a la organización y al mismo tiempo, una fuerza interna que también le impone desafíos y problemas para los actores del hecho educativo, pero cuando es dominada, permite eficiencia en el empleo de los recursos disponibles para lograr la consecución de los objetivos.
Por otro lado, al llevar a cabo el Proyecto “La Web un espacio para el aprendizaje” como proyecto de investigación y la creación del Servicio Elearning de Formación y Actualización Docente (www.sefad.org.ve) que busca desarrollar habilidades técnicas, humanas y conceptuales para abordar métodos tecno-educativos, herramientas y estrategias orientadas a las nuevas tendencias educativas en el siglo XXI, con lo cual se vería fortalecido el hecho pedagógico en función del aprendizaje de los estudiantes con las adquisición de habilidades tecnológicas en la praxis del docente como gerente del aula impulsando experiencias en la búsqueda del ser, hacer, conocer y convivir en la red de internet en las nuevas forma de enseñar y aprender.
De allí que, en los últimos cuatro (4) años el autor del proyecto de manera ininterrumpida ha realizado algunas formaciones, de los cuales uno de ellos para estudiante de bachillerato y nueve (9) para profesionales de la docencia de educación media y superior del Norte de Santander-Colombia y Venezuela (UPEL-IMPM, extensiones: Trujillo, Táchira y Boconó). A parte de que se han formado a casi 600 profesores, 10 de ellos han sido de Uruguay y México. Así como también, ha generado dos (2) publicaciones de las investigaciones realizadas a través de invitaciones a conferencias.
Por lo tanto, al estar inmerso en una investigación muchos más amplia ha permitido que el diseño en cada formación se vayan readaptando en cada ciclo de la misma una vez planificado, ejecutado, observado y reflexionado sobre el diseño de actividades con TIC, donde la selección de herramientas quedan sujetas a teorías de aprendizaje, diseño Instruccional, las metas de aprendizajes (taxonomía), la evaluación y retroalimentación, así como a los roles y mediación del facilitador.
De igual manera, se mencionan algunos resultados encontrados que afectan drásticamente las organizaciones educativas y por consiguiente al docente en sus distintas modalidades (presencial y semi-presencial) relacionada al uso de modelos tecno-pedagógicos y que son partes de una investigación sobre el futuro de las tecnologías dentro y fuera del salón de clase.
Encontrando que entre las opciones (a veces, casi nunca y nunca) para el aprendizaje guiado en internet un promedio entre todos los cursos realizados aproximadamente el 90% no han planificado una webquets para integrar las TIC, de igual manera, otros datos arrojado permitió observar que el 95% desconocen el modelo tecnológico pedagógico del contenido (TPACK) para saber como integrar la tecnología, así mismo, un promedio de 95% manifestó que no han invertido un aula de clase (flipped classroom) para fomentar el aprendizaje invertido (flipped learning), aunque manifiestan que usan videos en un 90% para la enseñanza y aprendizaje. Igual situación, sucede con el modelo de estilo de aprendizaje y actividades polifásicas (EAAP) donde declararon que el 96% no las emplea para su planificación con TIC.
Asimismo, al preguntar a los profesores en qué aspectos le gustaría que las TIC le ayudaran en su labor de docente, obteniendo los siguientes en promedio de todos los cursos: propiciar la investigación (81%); motivación de las clases (61.9%); en la obtención de material didáctico (42.9%), comunicación con sus estudiantes (81%); refuerzo de contenidos (42.9%); actividades lúdicas (28.6%), sin embargo, casi el 46% no sabe que es la web 2.0 y cómo podría aplicarla a la educación.
Concluyendo que la falta de competencia digitales de los profesores dificultan las actividades de aprendizaje activo y colaborativo en la red, así como, en las interacciones síncrono y asíncronas por el desconocimiento de métodos y estrategias que pudieran ser minimizadas al proporcionar experiencias que estimulen la práctica transformadora y el cambio educativo en nuevos espacios, nuevos tiempos y nuevos formas de enseñar y aprender con el fin de aprovechar la web 2.0 como entorno de los nuevos ambientes de aprendizaje digitales.
Mtro. Carlos Gómez Valderrama
Embajador Digital en Venezuela.
Autor del Proyecto “La web un espacio para el aprendizaje”