Algunos expertos afirman que los videojuegos pueden y deben ser utilizados con fines didácticos.
En la era digital actual, con la tecnología avanzando constantemente y la nueva generación creciendo inmersa en dispositivos electrónicos, surge la interrogante: ¿Los videojuegos pueden desempeñar un papel positivo en la educación?
Los videojuegos son software interactivos diseñados para ser jugados en dispositivos electrónicos como computadoras, consolas de videojuegos, teléfonos móviles o tabletas.
Estos juegos ofrecen a los jugadores la oportunidad de participar en experiencias virtuales donde pueden controlar personajes, tomar decisiones y resolver desafíos en un mundo digital.
Además, pueden abarcar una amplia variedad de géneros, desde aventuras y rompecabezas hasta deportes y simuladores.
¿Pueden los videojuegos ser usados en la educación?
De acuerdo con el portal web ‘Psicología y Mente’, desde su popularización en la década de los 80, los videojuegos han sido objeto de controversia, especialmente en lo que respecta a su influencia en los niños y adolescentes.
Sin embargo, un nuevo enfoque está emergiendo: ¿pueden los videojuegos ser una herramienta efectiva en la educación? Si se considera que muchos niños son apasionados jugadores, ¿por qué no aprovechar esta afinidad para acercarles a la educación de una manera atractiva?
La integración de medios digitales en las aulas ha ido evolucionando a lo largo del tiempo, desde los CD de audio hasta las pizarras electrónicas. Los videojuegos, con su inmenso potencial interactivo y atractivo, podrían ser el siguiente paso en esta evolución educativa.
Expertos creen que, si se utilizan adecuadamente, los videojuegos pueden reforzar el proceso de enseñanza. En el siguiente punto, exploraremos ejemplos concretos de cómo los videojuegos pueden ser una valiosa herramienta educativa.
Ejemplos de cómo los videojuegos pueden mejorar la educación
Según el medio ‘Roastbrief’, los videojuegos ofrecen una variedad de formas en las que pueden contribuir a la educación. Aquí presentamos algunos ejemplos destacados:
-Juegos de simulación: Los juegos de simulación son especialmente efectivos para enseñar conceptos y procesos complejos. Por ejemplo, las aplicaciones de simulación médica permiten a los estudiantes aprender sobre el cuerpo humano, diagnóstico de enfermedades y tratamientos de una manera interactiva y atractiva.
-Realidad virtual: Los juegos de realidad virtual brindan a los estudiantes la oportunidad de experimentar lugares y situaciones inaccesibles en la vida real. Esto puede incluir visitas virtuales a lugares históricos, exploración de ambientes naturales y mucho más, enriqueciendo la comprensión y la inmersión en el aprendizaje.
-Gamificación: La gamificación se centra en convertir el aprendizaje en una experiencia divertida y atractiva. Los videojuegos pueden ser una poderosa herramienta para enseñar conceptos matemáticos, científicos y otros temas de manera interactiva y desafiante.
-Juegos clásicos: Incluso los videojuegos creados principalmente para el entretenimiento pueden tener un valor educativo. Los juegos ambientados en épocas históricas, por ejemplo, permiten a los estudiantes sumergirse en eventos y contextos específicos, facilitando la comprensión de la historia y la cultura.
Expertos consideran que, los videojuegos tienen un potencial significativo en la educación cuando se utilizan de manera apropiada. La clave reside en la selección de juegos que se adapten a los objetivos educativos y en la integración estratégica de estas herramientas en el proceso de aprendizaje, lo que puede ofrecer a los estudiantes una experiencia educativa más dinámica y envolvente.
Además, a pesar de estas ventajas, es importante que los educadores y padres supervisen el uso de videojuegos en el aprendizaje y seleccionen cuidadosamente los títulos adecuados. No todos los videojuegos son igualmente beneficiosos, y es esencial garantizar que el contenido sea apropiado y se alinee con los objetivos educativos.
Fuente: María Camila Salas Valencia / eltiempo.com